El síntoma de cadera dolorosa en el niño, abarca un gran número de etiologías de pronósticos variables, bajo su aparente simplicidad se esconde la complejidad de un diagnostico, la mayoría de las veces es el dolor el primer signo muy anterior a cualquier otra manifestación clínica o radiográfica.
La complejidad en el diagnóstico se manifiesta por tres causas:
El diagnóstico del dolor de cadera en el niño lo realizaremos mediante la exploración clínica, encaminada a buscar patología asea, del cartílago y partes blandas (membrana sinovial, musculo, tendones) el interrogatorio nos va a ser difícil en el niño.
En cuanto a pruebas diagnosticas utilizaremos la radiográfica simple, que nos explora el tejido óseo y la línea fisaria.
En la ecografía de la cadera, podemos apreciar la presenta de liquido articular, así como la hipotrofia sinovial.
La presencia de líquido en la cadera, nos obliga a realizar, examen rutinario de laboratorio con PCR y VSG.
Una vez realizado la extracción del líquido, procederemos a examen bacteriológico del mismo.
Algunos diagnósticos son urgentes porque es apremiante la necesidad de una terapia inmediata. El tratamiento de fondo solo se debe de iniciar una vez establecido el diagnostico e certeza.
Patología distrofica: se presenta en el niño con plena salud, fuera de todo contexto infeccioso.
Entre ellas tenemos la osteocondritis de la cadera o enfermedad de Legg-Perthes-Calvé y la epifisiolisis Femoral superior o coxa vara.
Afecciones inflamatorias e infecciosas, es uno de los problemas cruciales de la orientación diagnostica, porque implica consecuencias terapéuticas diferentes según la etiología de que se trate.
Entre ellas tenemos, La sinovitis aguda transitoria o reuma de cadera, la artritis aguda, la artritis cronica juvenil y otras coxitis infecciosas.
Patología tumoral, en esta localización se pueden encontrar todos los tumores, la cadera es una de las localizaciones preferentes del osteoma osteoide. El dolor del osteoma osteoide se manifiesta más frecuentemente por la noche.
Las tomografías y la TAC posibilitan un diagnostico topográfico preciso.
Patología Traumática, esta patología está relacionada con el ámbito deportivo, las alteraciones de la cadera son relativamente raras, debiéndose a menudo aun entrenamiento deportivo inadecuado o demasiado intensivo sobre una estructura biomecanicamente débil.
Entre ellas tenemos las fracturas apofisarias o avulsiones apofisarias.
Afecciones diversas entre ellas tenemos la coxitis laminar corresponde a una necrosis del cartílago articular, puede ser complicación de la epifisiolisis, pero puede ser también de aparición espontánea.
La separación de la epífisis puede realizarse de forma cronica o aguda.
Epifisiolisis femoral crónica, es la más frecuente se observa en el 85% de los casos, empieza en niño obeso, con dolores en la ingle en la cara externa del muslo o en la rodilla de varios meses de evolución, no siempre cojera, la rotación interna restringida y la rotación externa incrementada .
En las formas graves la pierna suele estar acortada y adopta la actitud de rotación externa.
Epifisiolisis femoral aguda, el niño presenta una impotencia funcional absoluta del miembro inferior afecto, es de aparición brusca y sin antecedente traumático, existe acortamiento del miembro inferior y dolor agudo a la flexión y rotación externa.