Dolor localizado en la cara externa de la rodilla entre la banda iliotibial y el cóndilo externo.
Es una extensión de la fascia lata, se inserta en el cóndilo lateral de la tibia y puede rozar con el cóndilo lateral del fémur e irritar la bursa iliotibial subyacente.
Esta lesión es típica en corredores de fondo de larga distancia, ciclistas etc. que limita mucho su capacidad de progresión.
Puede deberse a causas como: uso de calzado desgastado o un almohadillado inadecuado.
Existen factores favorecedores de dicha lesión como son la dismetría de miembros inferiores, acortamiento de los músculos flexores de la cadera y del musculo tensor de la fascia lata.
Los pacientes con esta lesión presentan un dolor en la cara lateral de la parte distal del fémur, justo encima del cóndilo femoral lateral, el dolor suele aparecer a los pocos minutos de empezar la actividad deportiva y se va agravando sobre todo en las bajadas.
Dolor en la cara lateral de la parte distal del fémur, justo encima del cóndilo femoral lateral, el dolor suele aparecer a los pocos minutos de empezar la actividad deportiva y se va agravando sobre todo en las bajadas.
Con frecuencia aparecen edemas y acumulación de líquido alrededor de la bursa, la palpación de esta región mientras se invita al paciente a realizar flexión y extensión de la rodilla se puede apreciar una crepitación o sensación de agarrotamiento.
En la abducción contra resistencia al igual que la aducción pasiva, el dolor se agrava cuando el paciente permanece de pie con apoyo total del cuerpo sobre la extremidad afecta, flexionando la rodilla 30-40º.
Se realiza por la anamnesis y exploración clínica siempre que pensemos en dicho proceso, se realizara radiografía telemetría, en ella valoramos la dismetría de miembros inferiores, así como si en la rodilla existen calcificaciones de la bursa y estructuras adyacentes.
En las radiografías en carga de rodillas valoraremos procesos degenerativos de las mismas (gonartrosis), cuando tengamos sospecha de patología del menisco externo está indicado la realización de resonancia magnética, valoraremos el cartílago así como la existencia de liquido entre la cintilla iliotibial y el hueso de la rodilla.
En principio debe de estar orientado a buscar la causa desencadénate del dolor, debemos realizar un estudio de la pisada, valorar la pronación, existencia de dismetrías en miembros inferiores.
La administración de antiinflamatorios no esteroideos crioterapia, y fisioterapia, encaminada a descargar y estirar los músculos abductores de la cadera, fascia lata, glúteo medio, vasto externo.
Las infiltraciones de corticoides también son usadas, con flexión de la rodilla, se localiza la bursa de la banda iliotibial identificando el punto de máxima sensibilidad sobre el cóndilo lateral del fémur.
Con tratamiento médico y fisioterapia la mayoría de los pacientes evoluciona favorablemente, en caso de evolución tórpida el tratamiento pasa a ser quirúrgico, que consiste en realizar un alargamiento plano de la cintilla iliotibial, evitando el roce en la zona, este tratamiento quirúrgico se realza con resultados bueno.