GONARTROSIS( artrosis de rodilla) es un desgaste del cartílago articular de la rodilla que evoluciona lentamente e incluso puede estabilizarse durante varios años.
Edad, sexo, predisposición genética, factores metabólicos y otros biomecánicos como la obesidad, malformaciones congénitas o adquiridas, menicectomia sobre todo la externa, actividades profesionales y deportivas.
Dolor, dificultad para la deambulación, deformidad de las rodillas, crepitación, la movilidad disminuida.
Mediante la clínica y estudio radiográfico de la rodilla, con ello podemos seguir su evolución. Las nuevas técnicas como el artro TAC, nos aportan ver las lesiones condrales de superficie y la pérdida de cartílago.
Hoy día si el traumatólogo lo cree conveniente, dependiendo de la exploración y estudio radiográfico puede utilizar nuevas técnicas de imagen como la ecografía, resonancia y gammagrafía.
El tratamiento de la artrosis debe ser personalizado teniendo en cuenta:
Como medicación en la fase inicial utilizaremos, paracetamol, antiinflamatorios no esteroides, así como condroprotestores estos fármacos se definen por sus características plasmáticas y actúan sobre el dolor artrosico.
Los condroprotestores son fármacos de acción lenta ,Condroitin sulfato, glucosamina, se comportan de forma analgésica a nivel del dolor en artrosis de rodillas, cadera y manos, se trata de productos que forman parte de la matriz del cartílago.
La viscosuplentacion también se ha utilizado en la artrosis de rodilla, actuando de liquido sinovial y nutriente del cartílago, mejorando la movilidad y dolor.
Los tratamientos intraarticulares, con corticoides(infiltraciones) pueden mejorar los síntomas de los pacientes en las fases agudas, sobre todo si existe derrame aunque su efecto disminuye en pocas semanas.
Ácido Hialurónico, con inyección intraarticular son más activos administrados antes de los 65 años sobre artrosis poco o medianamente avanzadas.
En las personas jóvenes se desaconsejan los deportes de contacto, fútbol, rugby, balón mano, así como los deportes de presión y vibración, correr, saltos, giros tenis, etc.
Esta recomendado tanto en personas jóvenes como mayores, mantener la actividad física para la movilidad articular, la fuerza, con ejercicios en piscina, bicicleta, etc.
El ejercicio muscular nos va aportar estabilidad articular, movilidad articular y deformación articular.
La pérdida de peso está recomendada en todos ellos.
Cuando los tratamientos médicos han fracasado hay que recurrir al tratamiento quirúrgico.
Entre ellos tenemos:
La cirugía artroscópica es hoy la técnica que con mayor frecuencia se practica dentro de nuestra especialidad.
Los lavados articulares pueden ser útiles en caso de derrames crónicos, para eliminar residuos y revitalizar el cartílago.
Al eliminar los detritus se produce una mejoría temporal entre 6 meses y cuatro años, aunque todos esto gestos tienen como objetivo, la realización de una limpieza articular que disminuya la inflamación y mejore el deslizamiento de las superficies de contacto.
Si bien no es una técnica curativa, se consigue un alivio temporal en aquellos enfermos en los que ha fracasado el tratamiento médico y aun no son candidatos a técnicas quirúrgicas más agresivas.
La osteotomía consiste en cortar el hueso para descargas las presiones y realizar sobre el mismo cuñas positiva o negativa o cúpula.
Es una intervención que tiene más que probado su efecto beneficioso sobre el cuadro doloroso de la gonartrosis, sobre la alineación de la rodilla y sobre la mejora en la evolución de la degeneración osteoarticular.
Si se utiliza la técnica adecuada no se anulan las posibilidades futuras de colocación de una prótesis total y en cualquier caso ganar tiempo confortable en la vida de los pacientes.
Indicaciones
Están indicadas en pacientes jóvenes y con buena movilidad, dolor unicompartimental, rodilla clínicamente estable en planos AP y L, flexión igual o superior a 90º, altura de la interlinea femoro tibial igual o superior al 50% genu varo constitucional superior al 5%.
Las prótesis unicompartimentales nacieron para convertirse en alternativa a las osteotomías.
Indicaciones
Pacientes delgados que solo tengan afectado un solo compartimento, grado bajo de desviación en varo y valgo.
Contraindicaciones
Pacientes obesos, grandes desviaciones axiales en varo valgo, afectación de la articulación femoro patelar, laxitud ligamentaría y gonartrosis generalizada.
Cuando se realiza una artroplastia unicompartimental para su éxito, es fundamental la elección del paciente y cumplir con los siguientes patrones establecidos.
Éxito en su implantación:
Que solo exista una afectación unicompartimental, flexo menor de 5º y ligamento cruzado anterior integro.
Cuando implantamos una prótesis realizamos un remplazó total de la rodilla con cortes óseos a nivel, femoral, tibial y rotula, para crear otra articulación artificial.
Los pacientes con artrosis grave de rodilla y donde hayan fracasado algunos de los tratamientos descritos está indicada la prótesis total de rodilla con resultados satisfactorios.
Las mejoras en el diseño de los materiales protésicos nos facilita la adecuada implantación de la misma .
La prótesis total constan de un componente femoral, un componente tibial y un polietileno entre ambos de plástico especializados que nos favorece la congruencia entre ambas, igualmente la rotula se cubre de otro componente de polietileno que hace su deslizamiento por la escotadura femoral.
Hoy día la técnica quirúrgica está muy sistematizada bien si se realiza mediante navegación o cirugía mínimamente invasiva, es indudable que muchas de estas innovaciones aportan importantes ventajas, pero para incorporarlas a nuestro quehacer diario tenemos que tener presente dos reglas fundamentales:
El resultado a largo plazo de la prótesis de rodilla depende de su estabilidad, la inestabilidad protésica es causante del 25% de los casos de recambio.
Cuanto menor sea la estabilidad que proporcionan las partes blandas, mayor constricción será necesaria en la prótesis para obtener una estabilidad posoperatoria, la estabilidad a largo plazo de una prótesis es mejor cuanto menos constreñida sea.
Por ello los modelos más constreñidos presentan mayores posibilidades de aflojamiento a medio y largo plazo.
Ello nos condiciona a que debemos de elegir en cada caso el modelo más adecuado, pensando siempre en la supervivencia del implante a largo plazo.